Los adultos mayores representan una parte significativa de la población chilena y, dado que su salud requiere una atención especial, a menudo enfrentan dificultades para cubrir los costos asociados.
Es por eso que la Red de Protección Social, dirigida por el Ministerio de Desarrollo Social y Familia, ha implementado una serie de ocho beneficios y servicios específicamente diseñados para este grupo demográfico.
Estos beneficios van desde subsidios económicos hasta programas de salud y bienestar destinados a mejorar la calidad de vida de los adultos mayores.
Entre ellos se incluyen programas de atención médica especializada, apoyo psicosocial, acceso preferencial a medicamentos y asistencia domiciliaria, entre otros.
Es fundamental que los adultos mayores y sus familias conozcan estos beneficios y servicios disponibles, ya que pueden marcar una diferencia significativa en su bienestar y calidad de vida. A continuación te mostramos los beneficios disponibles.
8 beneficios en salud para los adultos mayores
Ahora detallaremos los beneficios disponibles que tiene el Estado:
Bonificación de la cotización obligatoria de salud
Este beneficio es para todas las personas beneficiarias del Sistema de Pensiones Solidarias, o aquellas pensionadas que tengan más de 65 años y sean parte del cuarto quintil más vulnerable de la población.
Corresponde a la no obligación de la cotización del 7% destinada a salud, pues es algo que cubre el Estado si la persona certifica que cumple con los requisitos.
Atención preferente para personas mayores y personas con discapacidad
Solo con mostrar tu carnet de identidad que acredite que tienes más de 60 años, los diferentes prestadores de salud te deben atender de manera preferencial, esto incluye las horas al médico, la entrega de medicamentos y también los diferentes procedimientos.
Cabe mencionar que la única razón por la que podrían hacerte esperar más, es porque otros pacientes presenten una condición de salud de emergencia o urgencia.
Más adultos mayores autovalentes
Es un programa que pretende ayudar a las personas mayores a través de la intervención de diferentes profesionales.
Consiste, por una parte, en la estimulación funcional, que corresponde a tres meses de talleres realizados por kinesiólogos y terapeutas ocupacionales, donde aprenderán de autocuidado y prevención de caídas.
Como segunda arista se hace un diagnóstico participativo con diferentes agrupaciones de adultos mayores, donde se capacita a los respectivos líderes comunitarios sobre estimulación funcional.
Para acceder a este programa, las personas deben estar inscritas en Fonasa y en algún centro de salud de atención primaria.
Examen anual de Medicina Preventiva del Adulto Mayor Fonasa
El EMPAM busca detectar algunos factores de riesgo que puedan llevar a la persona a una situación de dependencia. Se realiza mensualmente a través de una hora sin costo en el CESFAM que el adulto mayor esté inscrito.
Unidades Geriátricas de Agudos (UGA) en Hospitales de Alta Complejidad
Estas unidades de cuidados pretenden apoyar a los adultos mayores que han pasado por una condición complicada de salud y necesitan recobrar movilidad para no volverse personas dependientes.
Para acceder a este plan terapéutico, deben cumplir los siguientes requisitos: tener dos o más síndromes geriátricos (inmovilidad, inestabilidad-caídas, incontinencia urinaria y/o deterioro cognitivo); tener riesgo de pérdida de funcionalidad con un Índice de Barthel basal de 60 puntos y no estar en riesgo vital.
Programa de Alimentación Complementaria para la Adulta o el Adulto Mayor
El PACAM es la entrega gratuita mensual de dos productos: crema Nutra Max y bebida láctea Nutra Max, que tienen como finalidad complementar la alimentación de adultos mayores y otorgarle más vitaminas y minerales.
Para recibirlo las personas deben estar inscritas en un establecimiento de atención primaria de salud, además de tener sus controles y vacunas al día.
Vacunas para personas mayores
Son dos las vacunas a las que las personas de la tercera edad pueden acceder de manera gratuita en los distintos centros de salud públicos y privados: la de la influenza, que se entrega todos los años al inicio de invierno; y la Neumocócica, que se da una vez en la vida.
Evaluación Funcional del Adulto Mayor (EFAM)
Al igual que el EMPAM, el EFAM busca detectar factores de riesgo de dependencia, por lo que incluye preguntas sobre actividades que la persona puede realizar en su vida diaria.
Además, también se evalúa el estado cognitivo y la funcionalidad de los músculos, lo que resulta en la clasificación según grado de funcionalidad. Los niveles son: autovalente sin riesgo, autovalente con riesgo y riesgo de dependencia.