La histórica firma austríaca de motos, KTM, pasa por una delicada situación económica, un hecho confirmado con su declaración de quiebra hace unas semanas. Sin embargo, la empresa no solo se enfrenta a la insolvencia económica por una multimillonaria deuda que alcanza los $3.000 millones de euros, por si fuera poco, mantiene un enorme stock de vehículos que debe vender para disminuir sus pérdidas.
La entidad arrastra una crisis financiera desde 2023, un año en que a pesar de la disminución de la demanda, consiguió incrementar sus ventas. Sin embargo, una estrategia económica poco acertada y una desconexión con las modificaciones del mercado generó que no consiguiera adecuar su producción y, por consiguiente, fabricara más motos de las que realmente se vendían.
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¿Cuál es el futuro de KTM?
Según el portal alemán DerStandard, en el marco de una reunión con la junta de accionistas de la empresa se ratificó el nivel de stock de vehículos que debe vender, una cifra que rodea las 265.000 unidades, la cantidad que vende en un año completo.
Lo anterior, por defecto, obligará a la firma a reducir sus precios con el fin de concretar las ventas y disminuir su deuda para buscar otras alternativas que garanticen su futuro, donde se proyecta que sea comprada por otra empresa de irelevancia en este mercado.
Por lo anterior, la situación genera una oportunidad única para adquirir una de las unidades de la firma, generalmente excesivamente costosa debido a sus características.
