Este viernes 5 de febrero se desarrolló un partido de fútbol en la ciudad de Punta Arenas, el que fue interrumpido por Carabineros. El motivo es que aquella zona se encuentra en la fase 2 del Plan Paso a Paso y no se permiten encuentros deportivos de más de diez personas.
En total, la actividad contaba con 28 asistentes, siendo ocho de ellos funcionarios del Ejército de Chile. Junto con la policía, también arribó al sector la Seremi de Salud de la región de Magallanes, con el fin de sumariar a los dueños del recinto donde se desarrollaba el partido.
Asimismo, se informó que las 28 personas quedaron en libertad, a la espera de la resolución del tribunal, que podría multarlos con una sanción de hasta $50 millones.
A raíz del hecho, el Ejército emitió un comunicado, señalando que emprenderán acciones administrativas y disciplinarias contra el personal involucrado, a pesar de que se trataba de una actividad privada.
"La V División de Ejército es enfática en rechazar cualquier comportamiento que se aleje o contraponga las normas, razón por la cual determinará las responsabilidades administrativas y disciplinarias que emanen de este hecho, que no solo vulneró las medidas sanitarias establecidas, sino que también las disposiciones institucionales derivadas de la condición sanitaria en la que se encuentra la ciudad de Punta Arenas", señaló la institución.