En medio de la polémica que generó la orden a Carabineros para que efectivos del GOPE allanaran la sede del partido Comunes, el fiscal nacional Jorge Abbott, anunció que tomará cartas en el asunto.
Según publicó Fiscalía de Chile en su cuenta de Twitter, la autoridad solicitó un informe al fiscal regional sur, Héctor Barros, y ofició al Director General de Carabineros, Ricardo Yáñez, por el "desproporcionado uso de fuerza en el ingreso a la sede", de la tienda en la que milita la candidata a senadora de Apruebo Dignidad, Karina Oliva.
El revuelo se produjo por lo rápido de la acción consentida por el tribunal competente y por la forma en que se realizó, ya que no es recurrente que pida a esa fuerza táctica haga ese procedimiento en casos como los presuntos delitos que habría cometido la postulante de la colectividad que integra el Frente Amplio con un supuesto abultamiento de gastos electorales.
"Lamentamos la forma, no la compartimos", indicó Abbott, a propósito del procedimiento policial en el marco de la investigación a la anterior campaña de quien postuló a la Gobernación de la Región Metropolitana, por el posible delito de fraude de subvenciones en la declaración de gastos.
En la misma línea, el otrora Fiscal Regional de la Región de Valparaíso enfatizó que "la diligencia, tal como se concretó, pudo afectar no solo la proporcionalidad en la persecución penal, sino y más relevante los derechos de las personas imputadas y no imputadas".
Fiscales repudian proceder de Barros
Esta misma jornada, la Asociación Nacional de Fiscales publicó un comunicado donde dejaron en claro que "repudiamos absolutamente lo sucedido" y solicitaron modificaciones legales respecto de los controles del Ministerio Público hacia las policías.
De acuerdo con el gremio, la medida tendría por objetivo "evitar actuaciones como la ocurrida, y así poder garantizar el pleno respeto de los derechos humanos y garantías constitucionales de todos nuestros ciudadanos".
Cabe precisar que la dirigencia de Comunes, que tiene suspendida la militancia de Oliva y ya lidió con las renuncias de algunos de sus miembros implicados en el caso, cuestionó la acción policial encabezada por Héctor Barros.