Primer padre de Sichel golpea imagen de candidato: "Es mucha la mentira y la tergiversación"

Saúl Iglesias negó todo tipo de agresiones cuando estaba a cargo del abogado. "Yo considero que Sebastián muerde la mano que le dio de comer", recalcó.

Sebastián Sichel suma una nueva polémica en medio de su carrera presidencial. Luego de contradecirse y confirmar que sí retiro el 10%, ahora su primer padre sacó la voz para aclarar la versión que cuenta en su libro autobiográfico.

"Es mucha la mentira y la tergiversación (...) El niñito que anda ahí, el venezolano que anda pidiendo, ése es un niño vulnerable. Yo nunca mandé a mis hijos a mendigar. Nunca pasaron hambre. Y Sebastián eso lo sabe", recalcó Saúl Iglesias en entrevista con el The Clinic.

El hombre que se desempeña en faenas mineras en el Norte conoció a la madre de Sichel cuando estudiaban en un liceo nocturno. Relación que perduró por varios años y que quedó retratada en el libro "Sin Privilegios". En el escrito se detalla que vivió en una casa okupa y sufrió con episodios violencia intrafamiliar.

"Llegamos a una casa en Vergara 270. Estaba desocupada, habían robado todo adentro: el baño, el bidet, el lavamanos, el lavaplatos, todo. Había mucha gente que se había ido del país exiliada. Eran muchas, demasiadas casas botadas (...) Supuestamente (en el libro) la mandé al hospital por una pierna quebrada; y no, nunca… Yo lo único que sé es que la Ana María tenía problemas con el alcohol", explicó Iglesias todavía sorprendido por los dichos del candidato.

Sichel y el cambio de apellido

En base a lo vívido, Sebastián Sichel recalcó que decidió cambiarse el apellido. Especialmente por "los problemas que tuve por alguien que golpeaba a mi madre".

"Él me invitó a su departamento, tengo las fotos. Incluso le llevé una caña de pescar de acá de Iquique, se la llevé como regalo. Estuvimos hablando y me contó que él tenía autos antiguos, que había estado en Alemania. Incluso, vino después a Iquique, y le presté el vehículo (...) Yo nunca toqué a Sebastián. Nunca le pegué. Nunca le pegué a mi hija. Nunca los castigué. Nunca fui violento con ellos. Yo traté de que ellos llevaran una vida lo más normal posible", sentenció Iglesias.