Una auténtica batalla campal fue la que se vivió en la ciudad de Lopburi, en Tailandia, cuando dos bandas de monos rivales comenzó a atacarse en plena vía pública.
La pelea alcanzó tal nivel que miembros de la policía debieron intervenir con hondas y pistolas tranquilizantes para controlar la situación, instancia en la que además consiguieron capturar a uno de sus líderes, Ai Krao, quien destaca por su comportamiento brutalmente agresivo.
Y es que la urbe lleva meses siendo asediada por una manada compuesta por más de 3500 monos, los que se están tomando desde las calles hasta grandes centros comerciales.
Los vecinos temen que el lugar se convierta en una “ciudad fantasma” si la plaga sigue aumentando, ya que actualmente la invasión de estos animales ha llegado a tal nivel que ha hecho bajar el turismo, actividad principal de la zona, y hecho que varios negocios cierren sus puertas para siempre.