La Guardia Costera de Estados Unidos, detuvo un barco con al menos 390 inmigrantes ilegales provenientes de Haití, el cual es considerado uno de los mayores incidentes de tráfico de personas en la región.
Los 396 migrantes fueron detenidos cerca de la isla remota de Cayo Sal, ubicada entre Florida y Cuba. Estos serán procesados en la isla bahameña, y luego devueltos a su país.
Esta no es primera vez que sucede esto, puesto que el fin de semana recién pasado 69 personas fueron devueltas a Cuba, luego de intentar entrar a Estados Unidos en embarcaciones ilegales.