La caída de un enorme meteorito fue registrado en Mission, Texas, al oeste de la ciudad de McAllen y cerca de la frontera entre Estados Unidos y México.
De hecho, desde la NASA confirmaron la entrada de este asteroide a Texas, ya que sus expertos creen que se trataría de una “bola de fuego atmosférica”, que tiene 60 centímetros de diámetros.
La situación se originó el miércoles 15 de febrero a eso de las 18:00, cuando las personas de Mission sintieron una gran explosión que incluso sacudió sus casas.
De hecho, en redes sociales comenzaron a circular videos que dan cuenta de este fenómeno, el que según los expertos tendría unos dos pies de diámetro y pesaría unas mil libras (450 kilos aproximadamente).
Sin embargo, según información de la NASA, a Estados Unidos ingresan varios asteroides durante el año, los que finalmente caen en forma de meteorito.