Devastadoras postales ha dejado el inesperado temporal que se dejó caer desde el pasado 14 de agosto sobre la región norteña de Afganistán. Hay al menos 31 fallecidos y se sigue buscando a más de un centenar de personas desaparecidas, junto con el rescate de pobladores anegados.
Las fuertes lluvias que cayeron sobre Parwan, provocaron la rápida crecida de los causes que atraviesan los tres distritos de la región, los caudales arrasaron con todo a su paso, arrastrado incluso hogares completos.
Si bien son comunes las lluvias en la zona, la gravedad de la inundación se debió a que el temporal se desencadenó con gran potencia de un minuto a otro, sin poder advertir medidas de mitigación.
El departamento meteorológico de Afganistán, anunció que se esperan más lluvias durante los próximos días, situación que podría agravar aún más las condiciones de búsqueda de vidas humanas y la reparación de los daños en la zona.
Se cree que la agresividad de esta tormenta podría ser producto de las condiciones facilitadas por el cambio climático. Recordemos que en lo que va del año, se han desatado diversos desastres naturales que buscan responsabilidad en el calentamiento global.
