Un extraño hallazgo realizaron unos carniceros del estado de Carolina del Norte, Estados Unidos, quienes se especializa en vender carnes exóticas, entre ellas la de caimán. Al abrir uno de estos animales, los fileteadores pudieron ver cinco placas identificatorias de perros, en las que los dueños anotan el nombre de su mascota y un teléfono de emergencia.
Los trabajadores estaban trozando el anfibio de 4,5 metros de largo y cerca de 200 kilos de peso, cuando al llegar al estómago encontraron varios objetos que el reptil devoró durante su vida, entre ellas las plaquitas de los canes, las que mantenían aún los datos de los amos. Además había una bujía de auto, un casquillo de bala, varias uñas de gato montés y caparazones de tortuga.
Llamada acusadora
Tras el descubrimiento, uno de los carniceros llamó a uno de los teléfonos anotados en el artículo de metal, y para su sorpresa un hombre respondió al llamado. El sujeto al otro lado de la línea dijo que su perrito Scooby se había extraviado ¡HACE 24 AÑOS!, en el mismo lugar donde cazaron al gigante caimán, lo que da a entender que éste tendría al menos 36 años al momento de ser capturado.
En tanto, y a pesar del extraño descubrimiento, los dependientes de la carnicería procesaron al caimán, sacaron su dura piel y pusieron a la venta su preciada carne, la que puede llegar a costar sobre 37 dólares el kilo, algo así como 26 mil pesos chilenos.
