En las profundidades de la Pequeña Nube de Magallanes, específicamente en el joven cúmulo estelar llamado NGC 602, un grupo internacional de científicos perteneciente a la Agencia Espacial Europea (ESA) detectó las primeras candidatas a enanas marrones en el exterior de la Vía Láctea.
Estos cuerpos celestes se encuentran en un extraño límite entre ser una estrella o un planeta. De origen todavía desconocido, las enanas marrones son estructuras grandes, casi del tamaño de un planeta y, a pesar de emitir luz y calor no tienen la intensidad suficiente para clasificarse como una estrella.
Sorprendente descubrimiento: Detectan enanas marrones en el espacio exterior
En 2023, se registraron fotografías utilizando la misión del telescopio espacial James Webb de la NASA, en donde se develó un nuevo hallazgo, la existencia de enanas marrones fuera del área de nuestra galaxia.
¿Por qué es inédito este descubrimiento? Simple, sólo se habían localizado en nuestro vecindario. De acuerdo a Elena Manjavacas, miembro del equipo y de la ESA, “hasta ahora, sabíamos de unas 3.000 enanas marrones, pero todas viven dentro de nuestra propia galaxia”.
Por lo anterior, este hallazgo constituye una oportunidad única para estudiar estos cuerpos celestes, los cuales “parecen formarse de la misma manera que las estrellas, solo que no capturan suficiente masa para convertirse en una estrella de pleno derecho. Nuestros resultados encajan bien con esta teoría”, comentó Peter Zeidler de AURA/STScI para la Agencia Espacial Europea.
Según lo informado por ESA, estos cuerpos son los parientes más cercanos a los planetas gaseosos gigantes, flotan en el espacio de manera libre y no parecen estar vinculados a una órbita en particular. Además, comparten algunas cualidades con los exoplanetas, como la composición atmosférica y las tormentas en su superficie.
Al respecto, Elena agregó que “¡tenemos que estar preparados para descubrimientos revolucionarios en estos nuevos objetos!”.
