Manchester City vivió una tarde memorable en el Etihad Stadium. El equipo de Pep Guardiola solo necesitaba un triunfo para quedarse con la corona de la Premier League, sin embargo, el Aston Villa no le puso las cosas fáciles, y se puso en ventaja 2-0 generando el pánico y abriendo una luz de esperanza al Liverpool, que con ese resultado, tenían chances de "robar" el título con un triunfo.
Los "skyblues" salieron con todo, y arrasaron contra el equipo de Steven Gerrard, dos tantos de Gundogan y Rodri en tres minutos empataron el partido, lo que todavía no les aseguraba el título. En el minuto 81, un centro de De Bruyne fue conectado nuevamente por Gundogan quien en la boca del arco le dio el triunfo y a la postre el título a los ingleses.