El partido de Rosario Central y Peñarol por la primera fecha de la fase de grupos de la Copa Libertadores 2024 terminó en escándalo luego de que Maxi Olivera, defensa del cuadro Carbonero, recibiera una cobarde agresión por parte de los hinchas locales.
El futbolista de 32 años recibió un proyectil que le rompió la cara y lo dejó lleno de sangre en plena cancha del Gigante de Arroyito. Lo peor llegó cuando se fue a los vestuarios, ya que según el periodista Germán García de TyC Sports, el zaguero se desmayó. Posteriormente fue llevado de urgencias al hospital. Lamentable.
