Nicolás Jarry demostró que está en su mejor momento y venció al argentino Tomás Etcheverry (76°) por 6-7 (5), 7-6 (5) y 6-2 en San Carlos de Apoquindo. El punto final del chileno provocó la algarabía propia y de todos los hinchas chilenos al coronarse en el ATP 250 de Santiago, su segundo título ATP.