Los mexicanos aman los torneos cortos. La disputa de la fase regular solo asoma como el aperitivo para la gran fiesta que son los playoffs.
Tras 17 fechas, los seis primeros clasifican a la post temporada y además hay un Play-in, donde el séptimo y octavo definieron una plaza (pasó Pumas). El perdedor de ese duelo (Pachuca) aprovechó una segunda oportunidad cuando superó a Necaxa, que fue el ganador entre el noveno (el mencionado equipo de los Rayos) y décimo ubicado del torneo (Querétaro). Tras eso se arman las cuatro parejas de acuerdo con la ubicación en la tabla.
Luego viene lo bueno. Los cuartos de final (que ya empezaron) no da tiempo para correcciones ni sueños. Se vive o se muere. Una mala actuación puede lanzar al basurero toda una campaña regular. Y, por el contrario, una racha positiva te puede llevar a lo más alto, aunque en fase regular solo anduvieras a los tropezones.
Para los chilenos, el semestre ha tenido de todo
Los del América (Igor Lichnovsky y Diego Valdés) iban como avión exponiendo un juego potente y muy ofensivo, convirtiéndose en los favoritos para campeonar (y así retener el título conseguido en el Apertura). Incluso algunos periodistas locales hablaron de la aparición de un “equipo de época”. Pero la dolorosísima eliminación en las semifinales de la Copa de Campeones de la Concacaf, a manos del Pachuca, aún los tiene conmovidos. El choque en los cuartos, justamente ante los Tuzos, es una buena prueba futbolística y de carácter. El 1-1 en la ida, como visita, les da la primera opción, pues tienen ventaja deportiva por mejor campaña. Si no pierden, avanzan a la zona de los cuatro mejores.
Los de Toluca (Jean Meneses, Claudio Baeza y Valber Huerta), eliminados prematuramente en la arena internacional, quieren dejar fuera a las Chivas, lo que siempre conlleva una gran repercusión mediática. Meneses y Baeza no fallan en la titularidad mientras que Huerta ya estuvo en la banca, tras la recuperación por una intervención quirúrgica.
La derrota por 1-0 en Guadalajara los obliga a ganar -por cualquier marcador- en la vuelta para clasificar.
El otro nacional metido en estas luchas es el defensor Sebastián Vegas, del Monterrey, quien vivirá el clásico regio con Tigres. Un choque cargado de emociones que determinará al mejor en el estado nortino.
De la armada criolla solo uno no accedió a la postemporada. Fue Nicolás Díaz en el club Tijuana Xoloitzcuintles, conocido simplemente como Xolos. El equipo consiguió el antepenúltimo puesto, con una campaña discretísima (apenas dos triunfos en 17 fechas), y los directivos ya anunciaron la salida del DT Miguel “Piojo” Herrera.
El zaguero fue pieza inamovible y uno de los destacados, pero no le alcanzó para llevar al equipo a zonas importantes.
Ahora hay que ver los siguientes pasos para ver si el domingo 26 de mayo, algún chileno levanta el trofeo. No se ve como una utopía.
