Columna de Pablo Aravena: “¿Y por qué no miran a México?”

“Los chilenos en el fútbol mexicano parecen metidos en un limbo donde ni siquiera aparecen para la selección nacional”.

Diego Valdés es genio y figura en el América de México.

América venció 3-0 a Tigres en la final del Apertura 2023 de la Liga MX. El marcador global fue 4-1, aunque el trámite fue muy estrecho y solo se resolvió en el alargue del segundo partido. Con el estadio Azteca abarrotado (más de 70 mil personas), dos chilenos estuvieron entre los protagonistas y cosecharon aplausos.

Lo de Diego Valdés no sorprende. Hace rato que es figura en Norteamérica y lo realizado en este campeonato lo mantuvo como una de las estrellas de las Águilas. Como el volante más adelantado -o el delantero más retrasado-, el ex Audax Italiano lidera la ofensiva del elenco más popular de México. Arriba cuenta con la compañía de Henry Martin, Julián Quiñones y, desde la banca, Jonathan Rodríguez. Un ataque demoledor.

El otro chileno es Igor Lichnovsky. El zaguero formado en la U logró el título del Clausura 23 (que se juega en el primer semestre) con Tigres. Y en medio de la vuelta olímpica supo que ya no estaba en los planes del DT uruguayo Robert Siboldi. Lichnovsky buscó club y, ante la sorpresa de muchos, recaló en el América.

Allí se consolidó como el zaguero derecho, anotó un par de goles decisivos y no soltó más la titularidad. De hecho, es el único bicampeón en la temporada de la Liga MX 2023.

Sí, campeones del fútbol mexicano.

obtuvo el título de la Liga MX junto al América.
obtuvo el título de la Liga MX junto al América.

¿Tiene algún valor para el mundo futbolístico nacional? Al parecer, no. Ni los medios periodísticos, ni el colegio de técnicos, ni el Sindicato de Futbolistas ni los hinchas le dan mayor valor a lo sucedido.

De hecho, los chilenos en el fútbol mexicano parecen metidos en un limbo donde ni siquiera aparecen para la selección nacional -salvo excepciones- pues están en un mercado menos potente que Europa y menos conocido que el de los países sudamericanos.

¿Es bueno el fútbol mexicano? Los partidos tienen mejor ritmo y más técnica que los del torneo chileno. Los clubes tienen mejor infraestructura. Los estadios tienen un promedio -en la fase regular- de 20.651 personas POR PARTIDO. Y el espectáculo mueve millones de dólares.

¿Faltan cosas? Claro. Que vuelva el descenso y que logren afianzarse en el ámbito internacional, en un loop bien lamentable: son de lo mejor en la Concacaf, que es donde compiten habitualmente, pero no les alcanza fuera de esas fronteras (Mundiales de selecciones o de clubes).

Pero ese es otro problema.

La cuestión es saber si, en algún momento, el fútbol chileno cambiará su desidia y mirará a México con el afán de aprender algo. Para que las instituciones crezcan, el espectáculo mejore y los futbolistas chilenos sean más valorados y, obviamente, tengan una oportunidad real en la selección.