El Club Sporting Cristal es uno de los cuadros más populares de Perú; y uno de los grandes de ese país, por cierto. Los Cerveceros son el conjunto incaico que más veces ha jugado la Libertadores (36) y llegó incluso a la final en 1997. Así que sus méritos tiene también para sentirse un grande en América.
Es curiosa la situación por la que atraviesa el conjunto de San Martín de Porres. Su estadio, el Alberto Gallardo, es amenazado estructuralmente cada vez que crece el Río Rímac, el cual pasa exacamente por un costado de una de las tribunas del recinto. Con las inundaciones y el aumento de caudal de ese curso de agua de la semana pasada, el recinto corrió serio riesgo de ser arrasado.
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El Río Rímac, una constante amenaza para el estadio de Sporting Cristal
Tan severo es el potencial daño estrucutural en ese reducto, que la Tribuna Popular Sur, justo la que da hacia el Rímac, fue clausurada por las autoridades, debido al inminente riesgo de derrumbe.
Así, Sporting Cristal juega sus partidos como local (como el que disputó ayer allí Universidad Católica, por ejemplo) con una tribuna clausurada y pese a que se han anunciado medidas de mitigación, el propietario del recinto no es el club, sino el Instituto Peruano del Deporte. Como ocurre siempre en estos casos, la pelota va de un lado a otro y ahí está el estadio, a punto de ser devorado por uno de los ríos más largos de todo Perú.
Se espera que con la llegada del Fenómeno del Niño a tierras incas, se acrecientes las lluvias, por lo que el riesgo será aún mayor. La situación se vive año a año y, antes de haber sufrido con la crecida reciente, la última vez que el estadio se vio amenazado fue en enero de 2024.
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