Momentos de cambios en la televisión deportiva en Chile. La última “víctima” fue Francisco Sagredo, quien salió sorpresivamente de ESPN, donde estaba a cargo de la conducción del programa F90. La noticia se conoció la semana pasada y se sumó a otra partida intempestiva: la de Juan Cristóbal Guarello de DirecTV.
Fue a propósito de esto por lo cual Guarello se tomó los últimos minutos de su programa en YouTube, La Hora de King Kong, para referirse a estos movimientos en la industria que, aparentemente, reflejan un ambiente de censura en la TV futbolística.
Guarello y su salida de DirecTV: “No me querían porque criticaba a la Conmebol”
“Este fue el canal (ESPN) donde se prohibió hablar de los incidentes de la Copa América pese a que transmitían el partido y este se atrasó por dos horas y no podían decir una sola palabra de que la gente había intentado invadir la cancha, que se estaba colando, que había un grave problema de seguridad”, recordó Guarello sobre el tema Guarello, con quien trabaja en Radio Agricultura. “La instrucción fue ‘de esto ustedes no hablan y hablen del sistema de Colombia, de la pelotita, de Lautaro Martínez”.
“ESPN es el canal de las buenas noticias, es como la Dinacos del fútbol chileno”, disparó. “Tendrán muchos derechos, se comieron FOX, tendrán alianzas y lo que quieren son puros futbolistas comentando y algún periodista que te pueda coordinar, porque ellos no te hacen una pauta”.
Seguido, pasó a referirse a su propio caso. “Les voy a contar algo más, no en Chile, porque aquí estaba todo bien con el equipo periodístico, pero en Argentina los ejecutivos que manejaban DirecTV no me querían porque yo criticaba a la Conmebol, a Alejandro Domínguez, a todo el aparataje”, señaló.
“Al primero que pidieran que sacaran fue a mí... ‘es que tu criticas a los representantes, a la Conmebol’”, agregó, sobre por qué fue uno de los damnificados con el recorte de personal en la cadena internacional.
“Si nosotros nos dedicáramos a hablar solamente de la pelotita, traemos a un entrenador acá y él estudió, jugó, olor a camarín, perfecto, anda muy bien. Cuando hablamos de los dobles contratos, de las platas en negro, de los montajes… de eso no se habla”, fue su reflexión final.