Nicolás Jarry decidió hacer un alto en su temporada tras su exitoso paso por Roland Garros y se tomará unos días de vacaciones. El número uno chileno llegó hasta octavos de final en el Grand Slam francés, pero prefirió retrasar el arranque de su temporada sobre canchas de pasto como preparación para Wimbledon.
Jarry estaba anotado para participar desde la próxima semana en el ATP de Hamburgo, en Alemania, pero tras su extensa campaña sobre arcilla decidió tomar un tiempo más recuperar energías e irse unos días a Mallorca a descansar con su familia, su esposa Laura Urruticoechea y su hijo Juanito.
“Días de descansar y agredecer”, publicó el tenista chileno en sus redes sociales junto a sus dos fans número uno, quienes han sido claves en el repunte de sus resultados en los últimos meses.
Si el sol y las playas paradisíacas de la isla mediterránea no lo tientan para seguir más tiempo, los próximos desafíos de Nicolás Jarry en el circuito ATP serán el prestigioso ATP 500 de Halle, también en tierras germanas, y el ATP de Eastbourne en Reino Unido, los dos sobre pasto antes de ir a la Catedral para jugar Wimbledon, donde casi de seguro será uno de los 32 cabezas de serie.