Cristiano Ronaldo vive hoy un momento de plenitud familiar. Casado desde hace varios años con Georgina Rodríguez y vibrando con sus hijos. Sin embargo, no siempre ocurrió así y cuando era joven, como cualquiera que está viviendo los veinte, buscaba su amor por todas partes...y tenía formas espectaculares para conocer mujeres.
Y es que por estos días salió a la luz pública una historia que data del 2009, cuando el astro portugués tenía solo 24 años. El encargado de contar la increíble historia fue Rod Thornley, masajista del Manchester United por ese entonces.
En declaraciones a The Sun, el profesional comentó que CR7 se obsesionó con una cantante de la banda Pussycat Dolls: Kimberly Wyatt. “Estamos en marzo o abril y Cristiano Ronaldo se va a ir al Real Madrid. Todos sabemos que se va a final de temporada. Así que él me dice, mientras está viendo X Factor: “¿Quién es esta chica?”. Era Kimberly Wyatt de Pussycat Dolls. Él me dice: “¿Puedes darme su número?”, comenzó relatando Wyatt.
Y aquí es donde todo toma un tinte increíble.
“Te vendo mi auto a mitad de precio”
Tras la pregunta, impensada para el masajista, este se quedó pensando y vino la respuesta. “Qué me llevo yo de esto. Estoy consiguiendo los números de las chicas de todas partes y no obtengo nada de esto”, le dijo al portugués, para ver cuál sería su reacción.
“¿Te gusta mi coche?”. Tenía un Porsche Carrera descapotable”, sigue el desopliante relato de Thornley. Fue en ese momento que Cristiano Ronaldo mostró que estaba dispuesto a cualquier cosa para conseguir su objetivo de conoceer a Wyatt.
“Cuando me vaya al Real Madrid, te lo vendo a mitad de precio”, le dijo el actual jugador del Al Nassr al empleado del United, causando su sorpresa total, entendiendo que el vehículo estaba avaluado en cerca de 70 mil euros. Finalmente, todo salió como esperaba el futbolista. “Tardé como diez minutos en conseguir el número de Kimberly Wyatt”, aseguró Thornley.
¿Cumplió o no Cristiano Ronaldo con su Porsche?
El propio entrevistado confirmó que finalmente, CR7 sí cumplió con la promesa. Fue al final de temporada, cuando el delantero ya se marchaba a España para ser refuerzo del Real Madrid.
¿Recuerdas nuestro trato?”. Le di 34.000 euros por un coche de casi 70.000... ¡Al día siguiente lo vendí por 70.000 euros! Literalmente lo tuve sólo una noche. Fui a su casa, lo recogí, le hice la transferencia y lo vendí. Ese verano tuve unas vacaciones geniales en las Maldivas”, aseguró el masajista.
¿Qué pasó entre Cristiano Ronaldo y Kimberly Wyatt? Eso no se supo, porque el afortunado Thornley no quiso entregar detalles.
