Mientras aguarda por su despedida del fútbol con la camiseta de Colo Colo, programado para el 25 de marzo en el estadio Monumental, Esteban Paredes tuvo una tarde de gloria este jueves en el Hipódromo Chile.
El goleador del fútbol chileno no pasó desapercibido en la cancha del sector de la Plaza Chacabuco. Paredes, junto al ex futbolista Leonardo Monje, vieron como su caballo regalón Orgullo Vencido, se quedaba en la jornada de hoy con el clásico Héctor Moltedo Chichizola, una prueba sobre 1.000, donde respondió al favoritismo del público.
Es la tercera victoria consecutiva de Orgullo Vencido, un caballo colorado de tres años y de 468 kilos, que Paredes lo adquirió junto con Monje y con el turfman Roberto San Miguel hace unos meses. Además, se ganó el “Trébol de Plata” por esta marca.
“Adquirimos este caballo el año pasado. Lo conversamos una vez con el mismo Leo (Monje) y con Esteban (Paredes). Dijeron que bueno y comenzamos a buscar un caballo que estuviera corriendo. Ahí dimos con este caballo y se lo compramos al criador Francisco Bertin, quien es colocolino. Y cuando se enteró que Esteban estaba en la sociedad, accedió a vendernos este caballo”, cuenta San Miguel.
El caballo Orgullo Vencido conquistó su tercer clásico consecutivo. Y el de este jueves lo hizo con la conducción del experimentado jinete Luis Torres, quien lo guió de gran forma, respondiendo, además, al favoritismo del público. El colorado, que es preparado por Gabriel Reyes, de tres años pagó $1,50 a ganador.
“La verdad que estoy contento, muy felices de ver ganar al caballo su tercera carrera al hilo, como decimos nosotros. Yo soy hípico hace mucho tiempo, como de los 20 años. Hasta trabajé en el Club Hípico”, comentó Paredes tras el triunfo de Orgullo Vencido.
“Ya ganamos un clásico y esperamos que el domingo ganemos el otro clásico”, bromeó el goleador, quien también habló de su despedida el 25 de marzo.
“Será un momento especial, de mucha alegría y también con pena porque será mi último partido con la camiseta de Colo Colo”, cerró Paredes, que se veía muy feliz con el triunfo de su regalón Orgullo Vencido.