Sigrid Alegría y Andrés Velasco, dos referentes del teatro y la televisión chilena, estrenan este lunes la obra “Como la Vida Misma” en el Teatro Nescafé de las Artes. Sin embargo, lo que hace de este proyecto algo realmente especial es la participación de su hijo, Alonso Velasco, quien no solo se encargó de la musicalización, sino que también comparte escenario con sus padres por primera vez.
“Fue todo muy natural”, comenta la intérprete a LUN, recordando cómo el nombre de Alonso surgió cuando buscaban canciones para complementar la obra.
“Rápidamente salió su nombre, y todos lo dimos por hecho”, añade la actriz, destacando el orgullo que siente al trabajar junto a su hijo en un proyecto tan significativo.
Alonso Velasco, quien ya cuenta con experiencia en la musicalización de cine y teatro, se enfrentó al desafío de guiar a sus propios padres y al resto del elenco en la interpretación de las canciones que él mismo compuso para la obra.
“Debo confesar que cuando me vi parada en su estudio de grabación, y que él fuera mi jefe, era muy loco, pero al mismo tiempo, me sentía muy orgullosa de él”, expresa Sigrid Alegría.
De qué trata la obra de “Como la Vida Misma” con Sigrid Alegría y Andrés Velasco
La obra, que se presenta como una precuela de la popular teleserie homónima de Mega, aborda temas de paternidad y maternidad en un tono de comedia, con las dos parejas protagonistas en el proceso de formar sus familias.
Alonso Velasco no solo compuso cinco canciones originales para la obra, sino que también supo adaptar su dirección musical a las capacidades y limitaciones de los actores, logrando un resultado que ha llenado de orgullo a todos.
“Con Andrés estamos muy chochos y somos fans del trabajo que hace Alonso. Es un multiinstrumentista, un cantante hermoso, y está metido en tantas cosas”, comenta Sigrid Alegría, subrayando la versatilidad y el talento de su hijo.
Además de su participación en “Como la Vida Misma”, Alonso también se prepara para unirse al mundo de las cuecas este Dieciocho, compartiendo escenario con su madre y su abuelo en Colina.
Esta obra no solo es una celebración del talento familiar, sino también una muestra del orgullo y la satisfacción de ver a los hijos seguir sus propios caminos y destacar en ellos. Para Sigrid, interpretar las canciones de su hijo en esta obra va más allá de la responsabilidad profesional; es un verdadero honor y un motivo de alegría profunda.