Cindy Nahuelcoy hizo historia en el fútbol nacional, al convertirse en la primera mujer en integrar el cuerpo arbitral de la Primera División en Chile.
Sin embargo, la profesional no descarta su retiro, luego de recibir un castigo de 30 fechas de la ANFP, que incluso la afectó en su salud mental.
¿El motivo? Cindy Nahuelcoy acusó a Julio Bascuñán, miembro de la Comisión de Árbitros, de favorecer a su colega Leslie Vásquez en las designaciones por una supuesta relación sentimental.
Y ya que esta información no pudo ser comprobada, es que la deportista recibió una dura sanción.
Quién es Cindy Nahuelcoy
Cindy Nahuelcoy Jara nació el 2 de mayo de 1988, es oriunda de Pudahuel, en donde le gustaba salir a jugar pichangas con los vecinos, y tiene actualmente 35 años de edad. Y es que a diferencia de sus amigas, ella nunca se entretuvo con muñecas o tacitas, según ha declarado.
Tras salir del colegio, estudió Educación Física en la Universidad Central y fue ahí donde dio sus primeros pasos en el arbitraje, cuando tenía 19 años.
Específicamente, al ser convocada como árbitro asistente en un campeonato Cola Cola, donde por primera vez había mujeres jugando.
Desde ese momento, tras pasar por una grata experiencia, comenzó a asistir en el arbitraje de otras ligas en Santiago y regiones, tanto de mujeres como hombres.
Durante 7 años se desarrolló en el fútbol femenino, en donde consiguió la condición FIFA gracias a su buen desempeño. En el 2018 debutó en un campeonato masculino, como parte de la Segunda División y en el 2019 ascendió a la Primera B.
Posteriormente, en enero del 2020 hizo su estreno en la máxima categoría nacional de fútbol; mientras que, en el 2021, participó en la Copa Libertadores. En tanto, la última vez que Cindy Nahuelcoy arbitró fue en la fecha 15 del Campeonato Nacional 2023.
Pero otra faceta de Cindy Nahuelcoy es la cocina, ya que la árbitro nacional suele compartir recetas en sus redes sociales.
Pero no solo eso, ya que en las pasadas Fiestas Patrias, la profesional inauguró su propia Fonda en Puente Alto. Un emprendimiento que armó en solo tres días junto a dos socios y que llamó “No fueron 30 pesos, fueron 30 fechas”, en alusión a su castigo.