Daniel Sauer es un empresario de ascendencia judía que tiene actualmente 45 años de edad. Emerge en la escena pública chilena como una figura controvertida, no solo por su destacada trayectoria como controlador de Factop y la corredora STF, sino también por su vida personal, ya que está casado con la exmodelo y periodista Titi Ahubert.
Su nombre está ahora asociado con supuestas coimas dirigidas a funcionarios del SII y la CMF. Las investigaciones en curso revelan movimientos tributarios irregulares y la emisión de facturas falsas para disminuir la carga tributaria de STF, arrojando sombras sobre su exitosa carrera.
Revelaciones que agitan a Daniel Sauer
Este 2023 se filtraron audios que presentan a Daniel Sauer admitiendo pagos previos para evadir una multa masiva de 3.500 millones en el SII. Estas confesiones han intensificado la atención de las autoridades fiscales, que ya habían puesto en marcha acciones legales en su contra.
Los lazos familiares de Sauer se extienden más allá de su matrimonio con Titi Ahubert, conectándose con su hermano Ariel Sauer y los controladores del Grupo Patio, Álvaro y Antonio Jalaff.
Hasta la fecha, tanto el SII como la CMF han tomado medidas legales contra Daniel Sauer, y las investigaciones tributarias avanzan con determinación. Las consecuencias de sus acciones podrían redefinir no solo su carrera empresarial, sino también su legado en la escena pública chilena.
Titi Ahubert: De la Farándula a la Cerámica
Titi Ahubert es una periodista de 45 años de edad, reconocida por su participación en el enfrentamiento mediático con Daniela Campos en 1999 por el corazón de Iván Zamorano. La mujer, hace algún tiempo, ha dado un giro notable en su vida y ha dejado atrás las luces de la televisión para sumergirse en el mundo de la cerámica.
En 2016, inició su camino en el arte de la cerámica, y hace tres años fundó el taller “La Puerta Roja” junto a seis amigas.
Aunque sigue siendo reconocida en las calles y recibe solicitudes para regresar a la televisión, Titi Ahubert ha expresado su decisión firme de no volver a la pantalla. Su taller de cerámica, que ella describe como una fuente de ingresos suficiente para sobrevivir, se ha convertido en su principal enfoque.
“Creo que gano harto en el taller de cerámica, no es tanto tampoco, pero da para sobrevivir”, afirmó, destacando la independencia financiera que ha encontrado en su nueva vida. Las piezas únicas que crea, desde platos hasta tazas y esculturas, son vendidas a través de su página de Instagram.