La figura de Karol Lucero ha sido manchada por controversias en la actualidad, una situación totalmente contraria a cómo era cuando se encontraba en su mejor momento en la televisión.
El comunicador usó sus redes sociales para publicar una larga reflexión en donde habla de su niñez y crítica las prácticas actuales que lo tienen fuera del espacio público.
Este es el mensaje que dejó Karol Dance en su Instagram
Karol Lucero ha estado muy activo en sus redes sociales tras la oleada de críticas que sufrió por unas desafortunadas declaraciones hacia Felipe Camiroaga, unas por las que no tardó en pedir disculpas. No obstante, parece que el ir y venir del famoso en la opinión pública le afectó lo suficiente para publicar un largo mensaje.
“Aquí vamos una vez más. Agotado, pero justo a tiempo para volver a empezar. Siempre en mi familia, desde niño, he sido el llamado “condoro”, desde mi concepción lo más probable. El que daba vuelta los vasos con agua, el que sin querer arruinaba las sorpresas o adivinaba los regalos. Siempre me pasaba algo. Con el tiempo uno se va acostumbrando, pero al mismo tiempo se transforma en una carga. Traté de ocuparlo a mi favor y a través de la obsesiva perfección buscaba la forma de agradarle a todos, nunca bebí alcohol ni fumé, tampoco consumí drogas para no decepcionar a nadie, sin embargo siempre algo salía mal, en cualquier índole”, confesó el comunicador, resumiendo su experiencia como si lo siguiera una “nube gris”.
“No olvido los 15 años de abundancia y completa felicidad que viví, de algún modo me preparé para este invierno que vivo hace 5 años. Sigo prisionero de la cultura de la cancelación, esa que juzga a los famosos como si fuésemos delincuentes, donde pareciera más grave opinar o dar una declaración personal que las cosas que ocurren en el Congreso donde se legisla a favor del maltrato animal, por ejemplo. Pero no hay que ser iluso, la tercera ley de Newton es clara, toda acción tiene una reacción, no he dejado mi propia cultura de los ´condoros´ y sigo equivocándome una y otra vez, pero en todas las familias existe alguien como yo, seguramente me deben entender, al menos trato de no hacerle daño a nadie y nunca me rindo, así que siempre me volveré a parar”, agregó.
Recordemos que el locutor radial ha sido blanco de diversas críticas por varios episodios en su carrera, unos en los que el famoso siempre ha salido a esclarecer, pero que nunca parecen dar por terminado el juicio de valor que se le acredita.
“Yo ya no tengo nada que perder, pero creo que como sociedad tenemos mucho que ganar si tenemos un cambio de actitud. Agradezco a todas esas personas y marcas que a pesar de todo siempre me apoyan y ahí están para empatizar o ponerse en mi lugar, para que decir mis amigos o familia ya que sin ellos no se si hubiese resistido tantas batallas. Mención especial para Fran Virgilio, mi compañera, quien ha estado en todas siendo mi pilar y soporte; es la protagonista de nuestros próximos desafíos, esos sueños que nos faltan por cumplir, casarnos y formar una familia. Mi objetivo a corto plazo está enfocado ahí”, concluyó Karol Lucero en su larga reflexión sobre la “cultura de la cancelación”.
