Este año se entregó la vigesimotercera edición de los Latin Grammy, en los que todas las estrellas impactaron con sus looks en la alfombra roja. Sin embargo, Anitta se lució con sus diferentes outfits, cambiándose de ropa al menos cuatro veces, ya que además de cantar, fue presentadora.
Como presentadora, la cantante prefirió aferrarse a su vestido negro con transparencias, de Monôt, el mismo que lució en su llegada en la alfombra roja. Luego, la brasileña Anitta recreó con ayuda de Henrique Filho, un vestido de "pavo real" con incrustaciones de cristales que lució la cantante Xuxa en los años 80's.
Ante esto, Xuxa se sintió muy honrada y escribió en su cuenta de Instagram: "Hay gestos que valen más que homenaje, hay tributos que valen mil gestos... Ni siquiera sé si podría publicar esta foto, pero lo dice todo, hay cariño, respeto, admiración y ternura. Recibir un homenaje de esta personita que va a conquistar el MUNDO y un poco más", partió diciendo.
"Es simplemente un abrazo de esos que toman minutos que se puede sentir el corazón de quienes te abrazan... Y si hoy me abrazaste mi niña de oro. Anitta el mundo es tuyo, y yo soy tu fan (uno más de muchos)", finalizó.
Más tarde, Anitta se mostró con otro outfit con su catsuit de terciopelo bicolor azul con naranjo y estampado floral. Y finalmente, en su presentación la cantante lució un conjunto de short corto blanco con detalles plateados colgando y un crop top del mismo tono. Además, decidió no utilizar zapatos en su performance.