Rafael Cavada asumió un nuevo desafío los fin de semanas: conduce el noticiero matutino de Chilevisión y CNN. Una labor que el periodista no ve como un paso lógico, ya que en su pasado en Mega había probado y no le agradó.
"Pedí el coaching que nos daban algunos periodistas y no me gustó. No me gustó, porque, básicamente, sentía que no era mi posición. Eso fue un poco antes de irme de Mega. Entonces, no lo veía como un paso lógico. Siempre vi más como un paso lógico la radio, que te fuerza muchas horas hablando de noticias y a elaborar una forma de presentarlas. Por eso fue que en 2014 elegí la radio por sobre la tele", cuenta a TiempoX.
Con poco más de seis años de experiencia radial, período en el que también ha sido parte de "Contigo en la mañana", el escenario cambió. Por ello, tras su auspicioso debut -el noticiero quedó en el segundo lugar el sábado-, reconoce haberse sentido súper bien. "Tiene que ver con que son diferentes momentos en mi experiencia propia y la vida en este país, que han cambiado muchas cosas y se nos exige otras", expone Rafael Cavada.
Rafael Cavada: "La gente agradece que uno pueda relacionar una noticia con otra"
Su incorporación a las mañanas de los fines de semana ha generado un interesante lucha por la audiencia, ya que los canales han apostado por un formato informativo extenso como un matinal y con rostros ancla. Es el caso de Mega y el noticiero al mando de Rodrigo Sepúlveda, y "Sin despertador" de Canal 13, que está conducido por Polo Ramírez y Chantal Aguilar, espacios en los que la opinión y entrelazar temas, realizar análisis y recoger testimonios ciudadanos so parte de su pauta.
"La gente agradece que uno pueda relacionar una noticia con otra. Relacionar diferentes puntos de vista. Además, yo creo que después del estallido social, la gente espera una toma de posición respecto de ciertos temas éticos, de ciertos temas que tienen que ver con lo republicano y la moral", afirma el periodista, quien recuerda los años en los que ser un conductor de noticias sin opinión era visto como una virtud.
"En la época en la que yo empecé a trabajar en esto, los conductores no solo se le pedía que no lo hiciera, se les exigía. En la época de Bernardo de la Maza y Cecilia Serrano. Parte de los atributos que se le exigían a un conductor era no dar una opinión", relata, para luego agregar: "Ese tipo de cosas no se nos exigía. Pero te doy un dato, a mí me llevó a la radio Fernando Paulsen. Desde que empecé en Internacional, he estado con los periodistas que consideran un atributo tener una opinión bien fundamentada y un juicio de la realidad que estamos viviendo".