Revelan el lado más “juguetón” de la Reina Isabel

Su asistente confidencial cuenta todo sobre su vida en Balmoral.

Reina Isabel y desconocidos detalles de su vida en el Palacio

En una entrevista exclusiva con The Sunday Times, Samantha Cohen, una de las asistentes más confiables de la Reina Isabel II, ha revelado detalles íntimos y desconocidos de la fallecida monarca. Cohen, quien trabajó para la reina durante 18 años, ofreció un vistazo a la naturaleza “tímida pero juguetona” de Isabel II, mostrando un lado más humano y cercano de la histórica figura.

Revelan el lado más “juguetón” de la Reina Isabel

Cohen destacó que, a pesar de ser una figura pública, la Reina Isabel también “quería ser una mujer de familia”. Balmoral, su residencia favorita en Escocia, donde pasaba los veranos y murió en 2022, era el lugar donde la monarca se sentía más cómoda y disfrutaba de organizar las visitas de su familia. Según Cohen, la Reina revisaba personalmente las habitaciones de los invitados y valoraba profundamente la privacidad y la tranquilidad de su hogar.

Uno de los recuerdos más sorprendentes de Cohen es la velocidad a la que la Reina Isabel conducía sus coches por la finca de Balmoral. “Era valiente”, comentó. También relató cómo a la monarca le encantaba montar a caballo y disfrutar de la compañía de las familias que convivían en el lugar, incluidos los propios hijos de Cohen, quienes en ocasiones la veían pasar a caballo mientras desayunaban.

Pero el recuerdo más entrañable para la ex asistente fue el día en que ambas se embarcaron en una “caza” para liberar una mariposa que había entrado en el salón. “Nos reímos mucho”, dijo Cohen. “Era muy juguetona”.

Una líder sin ego

A pesar de los momentos de diversión, Cohen aseguró que la Reina Isabel nunca se dejaba llevar por el brillo de la realeza o el estatus de celebridad. “No tenía ego”, afirmó Cohen, destacando que Isabel II siempre entendió que su rol era un servicio, y lo cumplió a la perfección sin jamás buscar protagonismo.

Estos nuevos detalles sobre la Reina Isabel demuestran que, tras las formalidades y el deber, había una mujer profundamente conectada con su familia, divertida y cercana, algo que pocos tuvieron el privilegio de conocer.