Taylor Swift deslumbró en su primer concierto en Londres, y no lo hizo sola. La Familia Real Británica hizo una entrada espectacular, acompañada por una emotiva actuación de la guardia real que interpretó “Shake It Off” durante el cambio de guardia en Buckingham.
Este gesto especial fue compartido a través de las redes sociales de la familia real, rápidamente viralizándose en Twitter e Instagram, lo que despertó la curiosidad de los fans sobre quiénes podrían ser los “Swifties” reales.
El inesperado encuentro de Taylor Swift con la Familia Real Británica
La incógnita sobre los fans reales de Taylor Swift fue resuelta esa misma noche. El príncipe Guillermo junto a sus hijos, los príncipes George, Charlotte y Louis, estuvieron presentes en el multitudinario estadio de Wembley para disfrutar del concierto. Este evento coincidió con el cumpleaños número 42 del príncipe de Gales, quien aparentemente reservó un palco privado para festejar con sus hijos.
Un Momento Inolvidable
La asistencia de Guillermo a este concierto marca un momento significativo, diez años después de su memorable actuación con Taylor Swift y Jon Bon Jovi en una gala benéfica en el palacio de Kensington. En 2013, el entonces duque de Cambridge subió al escenario para interpretar “Livin’ on a Prayer” junto a las estrellas.
La relación entre Taylor Swift y la familia real británica parece haber perdurado a lo largo de los años. La presencia del príncipe Guillermo y sus hijos en el concierto de Swift no solo demuestra su admiración por la cantante, sino que también refuerza el vínculo especial que han compartido. Este evento en Londres no solo marcó un hito en la gira de Taylor Swift, sino que también se convirtió en una celebración familiar para los futuros herederos del trono británico.
El concierto de Taylor Swift en Londres fue una noche mágica que unió a los fans de la música y la realeza en una celebración inolvidable. La participación de la familia real, especialmente del príncipe Guillermo y sus hijos, añadió un toque especial al evento, recordándonos una vez más la influencia y el encanto duradero de Taylor Swift en todo el mundo.
