Han pasado 25 años desde el fallecimiento de Diana de Gales, Lady Di y hasta ahora se sigue especulando y hablando de su vida privada, entre estos aspectos destaca su relación con el príncipe Carlos, con la realeza y también con sus hijos, el príncipe William y príncipe Harry.
Y es que desde muy pequeños los hermanos tuvieron una vida expuesta, así quedó también demostrado durante el funeral de Diana de Gales, donde ambos tuvieron que ser parte del cortejo fúnebre.
Fue en esta línea que años atrás el hijo menor de Lady Di, el príncipe Harry expresó que la muerte de su madre fue algo que causó muchas sensaciones en él, pese a que en ese entonces tenía apenas 12 años.
"Estaba tan enojada con lo que le pasó a ella y con el hecho de que no hubo justicia en absoluto. Nada salió de eso. Las mismas personas que la persiguieron hasta el túnel, la fotografiaron muriendo en el asiento trasero de ese auto", expresó en el año 2021 a un documental de Apple TV+.
Así mismo, este también se refirió a lo difícil que fue en ese entonces tener que enfrentar las cámaras durante el propio funeral de su madre Diana de Gales, Lady Di, el mismo que fue visto por millones de personas al rededor de todo el mundo.
"Mi madre acababa de morir y tuve que caminar un largo camino detrás de su ataúd rodeado de miles de personas que me miraban mientras millones más lo hacían en la televisión, no creo que a ningún niño se le deba pedir que haga eso, bajo ninguna circunstancia. No creo que suceda hoy".
Pese a ello, años más tarde el príncipe Harry reveló que el haber sido parte del cortejo fúnebre de su madre, Diana de Gales, Lady di, es algo que lo llena de alegría.
El príncipe William y su opinión sobre su participación en el funeral de su madre Diana de Gales, Lady Di
El príncipe William también tuvo la oportunidad de referirse a su experiencia en el funeral de su madre Diana de Gales, Lady Di, revelando así que ser participe del cortejo fúnebre de su madre fue "una de las cosas más difíciles que he hecho".
También agregó que en ese entonces anhelaba pasar desapercibido tanto por las cámaras como por las millones de personas que estaban sintonizando el último adiós a Diana de Gales, y para ello decidió utilizar un flequillo como una manta de seguridad.
"Sentí que si miraba al piso y mi cabello caía sobre mi cara, nadie podía verme. No fue una decisión fácil y fue una especie de decisión familiar colectiva hacer eso, existe ese equilibrio entre el deber y la familia y eso es lo que teníamos que hacer" expresó a BBC.