El padre de Britney Spears, Jamie Spears, tiene un control tan total sobre la vida de la estrella del pop de 39 años, incluso tiene la última palabra sobre los gabinetes de color que tiene en su cocina, según un nuevo informe sobre su infame tutela. La cantante de "Toxic" supuestamente le dijo a su padre que quería volver a teñir los gabinetes, pero él pensó que ese trabajo de renovación sería demasiado costoso, según informó el New York Times, citando documentos confidenciales recientemente revelados.
La tutela de Spears, de la que su padre es miembro junto con una firma financiera, ha llevado a la cantante a quejarse ante un investigador judicial en 2016 de que estaba "harta de que se aprovechen de ella" y sentía que era "la que trabajaba y ganaba" su dinero, pero todos los que la rodean están en su nómina", dice el informe.
Ese año, la estrella del pop también informó al investigador que quería que la tutela terminara por completo y, según los informes, afirmó que su padre estaba "obsesionado" con controlar su vida. "Ella expresó que siente que la tutela se ha convertido en una herramienta opresiva y controladora en su contra", escribió el investigador de la corte.
El padre de Britney fue nombrado curador de su persona y co-curador de su patrimonio junto con el abogado Andrew Wallet en 2008 luego de su colapso público en 2007. Wallet renunció como administrador de la propiedad en octubre de 2020, y una firma financiera llamada Bessemer Trust fue reemplazada.
Jamie, de 68 años, sigue siendo co-conservadora del dinero de Britney, pero no de sus asuntos personales, que una fiduciaria con licencia, Jodi Montgomery, comenzó a supervisar temporalmente en septiembre de 2019. Es posible que Jamie tenga que dividirse, o renunciar por completo, a sus deberes como tutor de la persona, ya que Britney quiere que Montgomery, quien ha sido descrita como su administradora de atención, asuma permanentemente el cargo.
Ha habido rumores durante meses de que Britney ha estado tratando de sacar a su padre de la tutela luego de la presentación judicial de noviembre de 2020 de su abogado designado por la corte, Samuel D. Ingham III, en la que dijo que la cantante de "Toxic" supuestamente tiene "miedo" de su papá.