La reina Isabel se manifestó en una serie de cartas a su antiguo escudero, escritas desde sus amados corgis a los perros del personal. En el nuevo documental de ITV "The Queen and her Cousins", el actor y presentador inglés Alexander Armstrong dijo que descubrió notas escritas a mano enmarcadas en el baño del antiguo escudero de la reina, Sir Blair Stewart-Wilson.
"Él escribía estas cartas de su Jack Russell a los corgis, y la reina Isabel las contestaba. Y pusieron esta serie de cartas, y son muy divertidas. Ojalá pudiera recordarlas", recordó Armstrong, según The Telegraph. Armstrong agregó que las notas eran tan "perversamente divertidas" que tuvo que contener la risa.
Si bien la monarca de 94 años es conocida por su naturaleza estoica, es "mucho más animada en privado que lo que el público ve", dijo anteriormente a la revista People la biógrafa real Sally Bedell Smith. El autor citó una fuente en la finca de la reina en Norfolk que dijo una vez: "Puedes escucharla reír en toda esa casa grande. ¡Tiene una gran risa!".
La reina también puede ser sorprendentemente autocrítica. No mucho después de la boda del príncipe Carlos con la princesa Diana en 1981, se transmitió una repetición de la ceremonia en la televisión durante una fiesta en Londres a la que asistía el monarca. Al verse en la pantalla, "La reina dijo: 'Oh, ahí está mi cara de Miss Piggy'. Tiene la habilidad de reírse de sí misma", recordó Bedell Smith.
Las mascotas de la reina Isabel
La reina Isabel ha sido dueña de corgis y dorgis (un cruce con un perro salchicha) durante toda su vida adulta, pero se quedó con su último, Candy, tras la muerte de otro dorgi, Vulcan, a fines del año pasado.
Recientemente agregó dos nuevos cachorros a la familia: Un dorgi llamado Fergus, que lleva el nombre de su difunto tío, que murió durante la Primera Guerra Mundial en 1915, Fergus Bowes-Lyon, y un corgi llamado Muick, que lleva el nombre de Loch Muick en la querida escapada de verano de la reina. Finca Balmoral en Escocia.