¿Qué es Neuralink, la compañía de Elon Musk que logró implantar un chip en el cerebro humano?

La empresa ha logrado grandes avances en el mundo de la tecnología. Sin embargo, estos no se encuentran libre de polémica.

Elon Musk Así es la compañía del magnate.

Esta semana comenzó con sorprendentes noticias tecnológicas casi sacadas de un libro de ciencia ficción, puesto que Neuralink, la empresa liderada por Elon Musk, logró implantar por primera vez un chip en el cerebro de una persona, lo que abre el camino a los procesos de modificación corporal.

La compañía, cuyo nombre completo es Neuralink Corporation, es una entidad dedicada a la neurotecnología que tiene como principal foco el desarrollo de interfaces cerebro-computadora con tal de conseguir una simbiosis total con la Inteligencia Artificial.

Dicho en simple, los avances por los que trabajan buscan dotar a los seres humanos de habilidades similares a lo que comúnmente se conoce como ciborg, especialmente para ayudar a las personas que tienen algún tipo de discapacidad, tal como recuperar el habla, movilidad o visión en quienes las han perdido.

Los detalles de la compañía: Avances y polémicas.
Los detalles de la compañía: Avances y polémicas.

Neuralink, la compañía de Elon Musk: Sus avances y polémicas

Fundada en 2016 por un grupo de científicos e ingenieros, Neurolink tiene como metas el permitir “controlar el teléfono o el ordenador, y a través de ellos casi cualquier dispositivo, solo con pensar”, según ha comentado el mismo Elon Musk.

Incluso, en cuanto a las ayudas para personas con discapacidad, también el magnate puso como ejemplo el imaginar que “Stephen Hawking pudiera comunicarse más rápido que un mecanógrafo o un subastador. Ese es el objetivo”.

Ahora, por más fantasioso o futurista que suene todo esto, también hay otro lado de la moneda mucho más polémico, tales como las acusaciones de maltrato animal que recae en la compañía.

De hecho, en 2022 un grupo animalista denunció ante las autoridades de Estados Unidos que al menos 23 monos habrían tenido un “sufrimiento extremo” debido a los experimentos que recaen en ellos.

Al mismo tiempo, las investigaciones federales también tenían bajo el radar la muerte de 1.500 animales producto de experimentos fallidos, lo que iría en contra de la Ley del Bienestar Animal que rige en aquel país.