El lanzamiento de Windows 11 no ha estado exento de polémica, ya que son varios los equipos que, a pesar de que a priori cumplían los requisitos, no podrán recibir el nuevo sistema operativo por la falta de algún requerimiento.
Lo anterior se ha dado con la presencia de un TPM 2.0 en la placa madre, lo que ha hecho que, por ejemplo, quede fuera uno de los mercados más importantes del mundo: China.
Esto se genera porque el gigante asiático no permite que estén presentes los TPM de otros países, por lo que no se puede instalar Windows 11 de manera oficial por medio de Windows Update.
¿Qué solución queda? Si se pretende actualizar, finalmente lo que se debe hacer es realizar una instalación desde cero con una imagen booteable.
Una situación peculiar, que probablemente irá a cambiar en el futuro con nuevas actualizaciones de Windows 11, pero que por ahora no parece tener una solución para quienes están en China.