El serbio Novak Djokovic, eliminado en su primer partido del Masters 1000 de Montecarlo por el chileno Alejandro Tabilo, no encontró justificación alguna para el mal juego que desarrolló en el Country Club monegasco.
El ganador de veinticuatro títulos del Grand Slam no llegó a los dos minutos de rueda de prensa tras la derrota encajada en la tierra batida de Montecarlo.
“Más bien fue el peor día. Esperaba que no fuera así, pero era muy probable que jugara así. Simplemente horrible. Sensaciones horribles. Lo siento por los espectadores”, dijo.

Djokovic no tuvo excusas
“No tengo ninguna explicación. Tengo algunas y ninguna”, añadió el serbio, que no quiso justificar con unas molestias en el brazo derecho su bajo rendimiento: “Todo está bien. Lo del brazo es algo menor. No tengo lesión alguna”.
Djokovic reconoció que no confiaba en tener un buen rendimiento en Mónaco, pero tampoco una tan mala. “Esperaba una actuación digna, pero no esto. Había un rival difícil. Sabía que yo iba a jugar mal, pero no tanto”, dijo el serbio, ganador en Montecarlo dos veces y que ahora mira a su gran objetivo en tierra: Roland Garros.
Alejandro Tabilo, que ya había ganado a Djokovic en el Masters 1000 de Roma de 2024, jugará en octavos con el búlgaro Grigor Dimitrov.