El tenis chileno y el deporte nacional en general están de luto. Este miércoles, a los 91 años, murió Luis Ayala, uno de los mejores jugadores de todos los tiempos. El tenista falleció en Estados Unidos, donde se encontraba radicado hace décadas.
Uno de los mejores jugadores del mundo en las décadas de los 50 y 60, Ayala fue dos veces finalista de Roland Garros y campeón del Abierto de Italia (hoy Masters 1000 de Roma), uno de sus 47 títulos profesionales. En 1959 ganó el Grand Slam francés en dobles mixto, siendo junto a Anita Lizana los únicos chilenos que han levantado una copa en alguno de los Majors.
- Te podría interesar: Copa Davis: el pésimo momento de los jugadores chilenos que complica a Nicolás Massú
Antes de la creación del ranking ATP, alcanzó el puesto N° 5 de la clasificación mundial en 1959. En Copa Davis, tras una década liderando al equipo en la cancha, tras su retiro fue capitán entre 1974 y 1983, alcanzando la final de La Ensaladera de Plata el ‘79, cayendo ante Italia. También fue medallista de oro, plata y bronce en los Juegos Panamericanos.
Luis Ayala, “un gigante del tenis chileno”
“Con profunda tristeza, nos despedimos de Luis Alberto Ayala Salinas, un ícono del tenis chileno que dejó una huella imborrable en la historia del deporte nacional”, escribió la Federación Chilena de Tenis mediante un comunicado. “Fue un tenista de renombre internacional y un gran embajador de nuestro país en el mundo del tenis. Conocido por su destreza en la cancha y su espíritu competitivo, alcanzó los niveles más altos del deporte durante su carrera”.
Entre los varios homenajes que recibió en vida, se cuenta la condecoración Medalla de Oro al Mérito Deportivo otorgado por el Estado en 1960, además del diploma por su exitosa trayectoria deportiva que le entregó el Gobierno de Michelle Bachelet en 2017.
“En estos momentos difíciles, el directorio de la Federación de Tenis de Chile, encabezado por su presidente Sergio Elías Aboid, envía sus más sinceras condolencias a su familia y amigos del gran Lucho Ayala”, agregó la Fetech. “Hoy, el tenis chileno pierde a un gigante, pero su legado vivirá en cada cancha donde se juegue este hermoso deporte”.