Carlos Alcaraz sueña con seguir los pasos de su ídolo Rafael Nadal en Roland Garros y este domingo dio el primer paso en la final ante Alexander Zverev, llevándose el set inicial con un solidez 6-3. Gracias a tres quiebres de servicio, el español marcó diferencias desde temprano, cerrando todo con un gran punto que dejó sin respuestas al alemán.