Faltó la guinda de la torta. Matías Soto no pudo cerrar su semana soñada y este domingo cayó en la final del Challenger de San Luis de Potosí. En su primera definición de esta categoría, el tenista chileno perdió ante el colombiano Nicolás Mejía, quien tal como él, había dado la vuelta larga y clasificado al torneo desde la qualy.
Luego de una serie de victorias sorpresivas, incluyendo una sobre Tomás Barrios en cuartos de final, Soto partió la jornada apagado, perdiendo con facilidad el primer set. El segundo parecía seguir la misma tónica y el cafetalero incluso alcanzó a sacar por el partido, pero el chileno tuvo una reacción casi milagrosa para quebrar dos veces y llevar todo a la tercera manga y definitiva. Ahí, lamentablemente, se le acabó la bencina y terminó cediendo desde el comienzo para terminar cayendo por 6-1, 5-7 y 6-2 en más de dos horas y media de juego.
De todas formas el balance para el chileno de 24 años es espectacular. Con lo hecho en la arcilla azteca avanzará más de 150 lugares en el ranking ATP, entrando por primera vez al grupo de los 500 primeros, lo que le permitirá poder aspirar a torneos de mayor categoría. De hecho, la próxima semana tiene garantizado un lugar en el Challenger de Ciudad de México, donde entró al cuadro principal mediante una “excepción especial” gracias a su participación en San Luis de Potosí.
