Alejandro Tabilo alcanzó un nuevo hito en su carrera consiguiendo el primer título ATP de su vida. Luego de una semana soñada, el tenista chileno logró superar la qualy y llegar a la final del ATP de Auckland, donde venció al japonés Taro Daniel.
Tabilo, que ya aseguró su nuevo mejor ranking histórico, ha brillado en un torneo que guarda lindos recuerdos para el tenis chileno, ya que dos de los mejores jugadores de nuestra historia supieron coronarse en el cemento de Nueva Zelanda, tradicional parada previa al Australian Open: Marcelo Ríos y Fernando González.
El Chino, rumbo al número 1
Poco hacía presagiar que cuando Marcelo Ríos ganó el título del ATP de Auckland en 1998, sería sola la primera estación en el camino que apenas unos meses más tarde le permitirían ser el primer número 1 sudamericano de la historia. La pasada por Nueva Zelanda, eso sí, no fue sencilla.
Si bien como primer cabeza de serie (en ese instante era N°10 en el ranking ATP) el Chino vivió pocas zozobras rumbo a la final -apenas perdió un set ante el ecuatoriano Nicolás Lapentti, el local Mark Nielsen, el danés Kenneth Carlsen y el zimbabuense Byron Black- en la gran definición tuvo que llegar hasta el tie-break del set final para imponerse al australiano Richard Fromberg, por 4-6, 6-4 y 7-6.
Un partido que, lamentablemente, los hinchas chilenos no pudieron seguir en vivo, ya que Canal 13 prefirió dar un partido amistoso de fútbol de verano y transmitir la final en diferido... previo spoiler del recordado Alberto Fouillioux, quien se ganó las críticas de los televidentes.
Marcelo Ríos aprovechó el envión de Auckland para, dos semanas después, llegar hasta la final del Australian Open y, luego, ganar los Super 9 (hoy Masters 1000) de Indian Wells y Miami para llegar a la cima del ranking mundial.
Mano de Piedra arrasó en Nueva Zelanda
Los festejos chilenos volvieron al ATP de Auckland siete años después. En 2005, con Fernando González ya consolidado en la elite del tenis mundial (era el quinto cabeza de serie y 23° del ranking en ese momento), Mano de Piedra logró su quinto título profesional, con un detalle: los cuatro anteriores habían sido en arcilla, incluyendo un bicampeonato en el ATP de Viña del Mar.
Y el Feña salió de su molde con todo, ya que no perdió ningún set en el asfalto neocelandés, batiendo a los estadounidenses James Blake y Robby Ginepri, los argentinos Mariano Zabaleta y Juan Ignacio Chela y, en la final, al belga Olivier Rochus, al que derrotó por 6-4 y 6-2 en poco más de una hora de exhibición.