Cristian Garin comienza a recuperar el terreno perdido tras la larga lesión que lo dejó casi dos meses fuera del circuito. Luego de volver en algunos torneos Challenger protagonizando incluso un polémico retiro, el escenario de su regreso a los primeros planos está siendo uno de los campeonatos sobre arcilla más prestigiosos del mundo: el ATP de Hamburgo.
En el polvo de ladrillo alemán, Garin ya lleva tres victorias en cuatro días. Dos en la qualy para clasificar al cuadro principal y, este martes, otra en su estreno en el main draw. La víctima fue uno de sus rivales más repetidos en el circuito, el boliviano Hugo Dellien, al que derrotó por cuarta vez en cinco duelos.
Fue un triunfo bien trabajado en tres sets que además de darle el paso a segunda ronda, le permite acercarse al top 100 en el ranking ATP, el estatus que había perdido durante su ausencia por lesión.
Del Chino Rios a Jarry y Garin
Independiente de lo que siga pasando en Alemania, no cabe duda que los resultados conseguidos hasta ahora por Cristian Garin estiran aún más la estrecha y exitosa relación que el tenis chileno ha tenido con el ATP de Hamburgo, que hace 15 años pasó de ser un Masters 1000 a un torneo ATP 500. Pero, sin importar su categoría, la arcilla del Am Rothenbaum ha sido siempre fértil para nuestros jugadores.
Todo arrancó con Marcelo Ríos en los ‘90. Cuando todavía se le conocía como un “Súper 9″, el Chino consiguió ganarlo en 1999 para así completar su trilogía de grandes títulos en arcilla, más Montecarlo (1997) y Roma (1998).
En Hamburgo el zurdo también llegó dos veces a semifinales. La primera de ellas, en 1996, consiguiendo un logro que pudo quedar algo perdido en el tiempo: tras vencer al sudafricano Wayne Ferreira en cuartos de final, Ríos se transformó en el primer tenista chileno en entrar al top ten del ranking mundial, una valla que nunca antes las raquetas chilenas habían logrado superar.
Tras el Chino, vinieron Fernando González y Nicolás Massú. El Feña solo contó con mejores resultados un par de cuartos de final, pero en 2003 logró una de las victorias más importantes de su carrera, venciendo al australiano Lleyton Hewitt, número uno del mundo por entonces. Otra vez, algo que ningún chileno había conseguido antes.
Mientras, el actual capitán del equipo chileno de Copa Davis apenas una vez pudo superar la primera ronda en Hamburgo (2005), pero lo hizo derrotando al N° 3 de ese momento, el estadounidense Andy Roddick.
Tras el “trío dorado” del tenis chileno vino un tiempo de escasez en los grandes torneos, pero tanto Garin como Nicolás Jarry se han ocupado de volver a los grandes triunfos. Y Hamburgo ha sido uno de los torneos donde mejor les ha ido, ya que los dos se las ingeniaron para llegar a semifinales.
Jarry fue el primero en 2018, venciendo en el camino al austríaco Dominic Thiem cuando era N° 8 del ranking mundial, mientras que el propio Garin lo igualó en 2020. ¿Hasta dónde llegará el ariqueño en esta edición?
