Nicolás Jarry avanzó este martes a la segunda ronda del torneo de Roland Garros al derrotar al boliviano Hugo Dellien en un encuentro que, según confesó, fue “una batalla muy dura” sobre todo a nivel mental. ”Estoy muy contento”, afirmó tras el duelo, en el que reconoció que tuvo enfrente a “un guerrero al que “no se le puede dar una”.
”Lo di todo. Mentalmente fue una batalla muy dura”, explicó Jarry, quien se mostró satisfecho sobre cómo manejó los tiempos del encuentro, en el que supo mantener la tranquilidad en los momentos clave para terminar imponiéndose por 6-4, 6-4 y 6-2.
Consideró que este partido ha sido el “mejor” de los que ha disputado hasta ahora en Roland Garros, en la que es su cuarta participación. De hecho, es la primera vez en su carrera que logra superar la primera ronda.
La victoria de este martes permite a Jarry, de 27 años, mantener el buen momento que está viviendo esta temporada, con triunfos en dos torneos (Santiago y Ginebra) y aupado en el puesto número 35 de la clasificación mundial de la ATP.
“Siempre me ha costado la soledad del tenis”
Jarry reconoció que esta victoria le da “más energías” para seguir trabajando y valoró el que su mujer (Laura Urruticoechea) y su bebé Juanito le acompañen en el circuito. ”Siempre me ha costado la soledad del tenis y tenerlos a ellos (...) me ayuda mucho para desconectar y para aprender cosas”, explicó.
”Es algo que no todo el mundo puede hacer”, dijo, y añadió que estar con su familia le ayuda a tener “más perspectiva en la vida de que no todo es tenis” para luego volver con más energías a la cancha.
El número uno chileno se enfrentará en segunda ronda a un difícil desafío, el estadounidense Tommy Paul, cabeza de serie número 16, quien derrotó al suizo Dominic Stricker, procedente de la clasificación, por 6-3, 6-2 y 6-4.
”Va a ser un partido muy difícil” debido al juego “más directo” de Paul, ante el que avanzó que intentará “buscar la manera de estar ordenado frente a su tipo de juego”. Sobre todo, insistió en la importancia de mantener la calma en los momentos claves: “Al final, el tenis es mental”.