En la última semana, Draymond Green se ha vuelto a llevar el protagonismo de los Golden State Warriors debido a sus malas actitudes dentro de la cancha, que han provocado incluso la frustración de sus compañeros. El juego de la noche de este viernes contra los Charlotte Hornets no fue la excepción y volvió a realizar un violenta acción, otra vez arriesgándose a una severa sanción.
El jugador de 36 años, ante la presión de Grant Williams, no pudo realizar un pase, tras lo cual le lanzó una patada a la entrepierna a su rival. Si bien no hubo contacto directo, la acción sirvió para que ambos se encararan.