New Orleans Pelicans esté metido de lleno en la batalla por clasificar a los playoffs de la NBA en la Conferencia Oeste. Sin embargo, este jueves pueden haber recibido un golpe casi fatal. No por haber perdido ante Orlando Magic, sino porque podrían quedarse sin una de sus principales figuras: Brandon Ingram.
El alero cayó al suelo con evidentes señales de dolor luego de intentar evitar una canasta del equipo rival. Tomándose de inmediato la rodilla izquierda, las repeticiones mostraron un movimiento “no natural” en la extremidad, por lo que se teme pueda ser una lesión de gravedad. De hecho, el basquetbolista tuvo que ser ayudado por dos compañeros para poder salir de la cancha y llegar a los camarines, donde se le hicieron los primeros exámenes.