Ben Simmons deberá pagar un costo muy alto por negarse a jugar con Philadelphia. El base armador australiano se encuentra perdido desde la eliminación de Sixers en la pasada postemporada a manos de Atlanta. El hombre de casi siete pies de estatura no ha vuelto a la duela desde entonces, situación que ya ha afectado a su cuenta bancaria de manera muy fuerte. Su más reciente multa supera los 300 mil dólares y no parece que su equipo piense en detenerse con dicha cifra.
Simmons pidió abiertamente un cambio de equipo durante la temporada baja, solicitud que fue negada por Sixers de inmediato. Como respuesta, el primer elegido en el draft de 2016 no se presentó en el campo de entrenamiento del equipo y cuando finalmente asistió a las prácticas, Doc Rivers le solicitó que se retirara por negarse a participar en un ejercicio. Durante el periodo mencionado, Ben recibió multas que alcanzaron los dos millones de dólares.
Poco después del incidente en la práctica, Simmons le comunicó al equipo que no se encontraba mentalmente en condiciones para participar en entrenamientos y partidos, ante lo que Philadelphia detuvo las multas a su persona. El dos veces seleccionado al quinteto defensivo ideal de la NBA no ha jugado en ninguno de los nueve partidos de los Sixers en la temporada, mientras sus compañeros han construido una marca de 7-2, la mejor en toda la conferencia Este.
Dos semanas después de explicar sus motivos, Simmons ha vuelto a ser multado, ahora por 360 mil dólares, esto de acuerdo con información de Adrian Wojnarowski, reportero de ESPN. La nueva sanción se debe a su decisión de no cooperar con los especialistas del equipo en mejorar su salud mental, así como incumplir con sus responsabilidades relacionadas al baloncesto.
En el último par de semanas, el base armador ha trabajado de manera privada con su propio equipo, pero se ha negado a compartir sus avances con la franquicia de la ciudad del amor fraternal. Simmons tiene cuatro años y 147 millones de dólares pendientes en su contrato, con 31.5 mdd para la campaña actual.