La industria automotriz sigue con grandes complicaciones a nivel mundial y uno de sus actores más importantes anunció drásticas medidas con el objetivo de disminuir las pérdidas. Se trata de Volkswagen, compañía que cerraría tres de sus diez fábricas en Alemania.
El mayor constructor europeo evalúa esta compleja decisión, lo que de paso derivaría en la pérdida de miles de puestos de trabajo en Alemania.
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El Grupo Volkswagen batalla por aminorar las pérdidas, por lo mismo, fue la propia presidenta del comité la empresa, Daniela Cavallo, quien dio a conocer la noticia del cierre de tres fábricas en una reunión con los trabajadores de Volkswagen, según recogen diversos medios especializados.
Y no es lo único. El resto de las instalaciones que se mantengan operando deberán reducir su tamaño, debido a que no se llega a los niveles de productividad necesarios, llevando a que los costos sean el doble de los que tienen sus principales rivales.
“Todas las plantas alemanas de VW están afectadas por estos planes. Ninguna de ellas está segura”, comentó Cavallo.
Respecto de esta situación, Florian Hirsch, trabajador de la compañía desde 2003, comentó en la agencia Reuters que “el problema con la gerencia es que ha conocido estos problemas durante casi 20 meses, pero no presentó ninguna solución innovadora, excepto que los costos tienen que ser recortados y que los empleados supuestamente causan los problemas. Parece que no tienen absolutamente ningún plan y nadie sabe lo que está pasando por sus cabezas. Creo que esto fomenta aún más la frustración y el miedo, aparte de lo que está sucediendo en este momento”.
Cabe señalar que Volkswagen emplea a unas 120.000 personas en Alemania, aproximadamente la mitad de ellas en Wolfsburgo.
La marca opera un total de diez plantas en el país, seis de ellas en Baja Sajonia, tres en Sajonia y una en Hesse.
En septiembre pasado, la firma alemana puso fin a un acuerdo que regía desde hace tres décadas y que garantizaba que no habría despidos por razones empresariales. Pero, el nuevo escenario obligó a que, a partir de mediados de 2025, los despidos por razones de la situación de la empresa sean posibles.
El tema seguirá en los próximos días, con una nueva ronda de negociaciones entre los representantes de los trabajadores y el fabricante alemán.