El partido entre Liverpool y Real Madrid era el choque que se robaba las miradas en la Champions League. Ambos elencos necesitaban un triunfo para acercarse a la clasificación a la siguiente fase, y el duelo no defraudó.
Finalmente fueron los británicos los que se llevaron la victoria en condición de local, derrotando por 2-0 a los españoles.
Sin embargo, uno de los hechos que llamó la atención en el compromiso fueron los dos penales errados. El primero, por parte de Kylian Mbappé, y el segundo, minutos después, por Mo Salah, cuando el marcador marcaba 1-0 a favor de los Reds.
Sin duda quien quedó peor parado fue el astro francés, que nuevamente defraudó al Madrid y no convirtió el tanto que significaba el empate en el marcador.