Todo es alegría en Moldavia, pequeño país de poco más de 2.5 millones de habitantes que están felices con el Sheriff FC, equipo que venció al Real Madrid en la Champions League, pese a que los pronósticos indicaban que los "Merengues" eran claros favoritos... y cómo no, si jugaban ante la "Cenicienta" del certamen en el Santiago Bernabéu.
La algarabía de los moldavos se desató desde el minuto 89', cuando Sebastien Thill batió con un certero zurdazo a Thibaut Courtois, anotando un verdadero golazo para darle el triunfo a su equipo.
Terminado el encuentro, el camarín del Sheriff estalló en el Bernabéu. Con varias pizzas y la ropa tirada por todas partes, los jugadores y directivos del club festejaron con todo, y no es para menos, ya que en su debut en la Liga de Campeones de Europa, llevan 2 triunfazos consecutivos ante dos potencias, pese a que eran considerados como el equipo más débil del torneo con sólo un 1% de probabilidades de quedarse con la "Orejona".
