Lamine Yamal es hoy una de las grandes figuras del fútbol mundial. Crack con el Barcelona y estrella absoluta de la Selección Española, el puntero de 17 años sigue rompiendo récords de precocidad, aunque hace un tiempo su carrera pudo haber dado un giro muy radical.
Esto porque el país de su padre, Marruecos, intentó derechamente convencerlo para que los representara a nivel internacional, visualizándolo como su símbolo para el Mundial 2030, en el que serán locales.
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“Lamine Yamal es un crack generacional que intentamos que jugase con Marruecos, pero eligió España y le deseamos mucha suerte”, reconoció el DT de Los Leones del Atlas, Walid Regragui.
“Yo hablé directamente con Lamine Yamal y él fue honesto conmigo, y también con la Federación de Marruecos”, agregó el entrenador que hizo historia llegando hasta semifinales en Qatar 2022.
“Lo intentamos todo con el proyecto que tenemos con Marruecos, con la Copa de África en nuestro país, con el Mundial de 2030, con el cariño que el país puede darle a Lamine... Pero el chaval nunca mintió. No jugó al soy marroquí o español y eligió a España”, explicó.
Nacido en Cataluña, pero de madre guineana y padre marroquí, fue descubierto por el Barcelona a los seis años, cuando se le invitó a sumarse a La Masia.
Desde joven empezó a despuntar, y por eso tanto España como Marruecos trataron de “amarrarlo” desde temprano. En septiembre de 2023, con 15 años, finalmente hizo su elección, debutando con La Furia Roja y transformándose en el seleccionado más joven de su historia. Unos meses después los lideró para ganar la Eurocopa 2024.
Pero en la nación africana no le guardan rencor. “Dos o tres días después de hablar con él me llamó con respeto y me dijo ‘míster, gracias por el cariño pero voy a elegir a España. Me siento español’. Es un chaval muy honesto”, recordó Regragui.
