Gustavo Quinteros protagonizó un polémico momento en Brasil. Su equipo, Gremio, estaba quedando eliminado en semifinales del Campeonato Gaúcho ante el Juventude, cuando Gustavo Martins marcaba en el minuto 97 para mandar la definición a penales.
Sin embargo, el árbitro central consultó al VAR por la validez de la jugada, lo que desató la furia del extécnico de la UC y Colo Colo, quien ingresó a la cancha y golpeó a Énio en la cara en medio de un forcejeo. Segundos después al entrenador le tocó recibir un golpe de Reginaldo. Ambos fueron expulsados, aunque el entrenador argentino se calmó y terminó pidiéndole disculpas al jugador agredido.
Al final el gol fue validado y el duelo se fue a la tanda de penales, donde el equipo de Quinteros logró avanzar a la final del Campeonato Gaúcho, donde se medirá ante el ganador de Inter de Porto Alegre y SER Caxias, que juegan esta noche.