En agosto de 2023, Al Hilal dio un bombazo sacando a Neymar del Paris Saint-Germain por 90 millones de euros. El brasileño tendría un cuantioso salario que rodearía los 200 millones de euros al final del contrato de dos años, pero todo terminó antes de lo previsto y el jugador volverá al Santos de Brasil.
“Neymar se paga solo”, era la consigna de todo futbolero al momento en que se reveló el contrato y las condiciones económicas que tenía, pero la realidad es que Ney no estuvo ni cerca de mostrar el fútbol que puede llegar a dar.
La estadística de Neymar en Al Hilal
Su paso estuvo marcado por la grave lesión que sufrió en agosto de 2023 en un partido de Clasificatorias ante Uruguay. Neymar se cortó el ligamento cruzado anterior y el menisco de su rodilla izquierda, lo que lo dejó más de un año fuera de las canchas.
Sus números son modestos: debido a su lesión, solo jugó siete partidos, marcó solo un gol y entregó tres asistencias en 17 meses. El jugador de 32 años volvió a jugar en noviembre de 2024 pero volvió a lesionarse, quedando tres meses fuera de las canchas. Mientras aún se recuperaba, Al Hilal tomó la decisión de no inscribirlo para el segundo semestre, encaminando el regreso de Ney a Brasil.
El brasileño de 32 años se marcha libre al Santos, tras rescindir su contrato de mutuo acuerdo con el club árabe.
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Así era el contrato de Neymar en Arabia
Aunque el PSG recibió 90 millones de euros por Neymar, el sueldo del jugador no se quedaba atrás: 175 millones de dólares anuales. Además, ganaría cerca de 88 mil dólares por cada victoria de su equipo y 550 mil dólares cada vez que publicara un post mencionando a Arabia Saudita.
El contrato también incluía privilegios que cualquier futbolista soñaría. Contaba con un avión privado a su disposición, una mansión con 25 habitaciones, tres saunas, una piscina de 400 metros cuadrados y un refrigerador que siempre esté lleno de jugos de Açai y guaraná.
Entre sus exigencias figuraban tres autos de lujo, un Bentley Continental GP, un Aston Martin DBX y un Lamborghini Huracán, además de tres combis, un vehículo todo terreno y un chofer disponible las 24 horas, los 7 días de la semana.
A pesar de estar rodeado de estos lujos, los problemas físicos le impidieron rendir en la cancha. Ahora, con 32 años, regresará al fútbol sudamericano para disfrutar los últimos años de su carrera en Brasil, buscando recuperar su mejor nivel.
